Cuando te registres, recibirás un mensaje semanal sobre el estilo de vida yóguico.
X¡Vaya nombre enigmático e intimidante! No es para menos porque la luna llena del próximo 15-16 mayo viene con eclipse total (de ahí el nombre) y en Escorpio para que cerremos un ciclo, soltándolo definitivamente y que así podamos abrirnos al nuevo.
Los pasajes de una etapa a otra no son fáciles y suelen dar vértigo (o miedo). Así que una de las ventajas de ser yogini, mujer del yoga, es que vives despierta a la magia de los ciclos lunares, abierta a los cambios incesantes de la vida y enraizada en el poder inmensurable del principio femenino divino que fluye por ti. Además, te entregas al proceso eterno de disolución-creación-sostenimiento con total confianza.
Personalmente, he vivido siempre de cambio en cambio, ya fueran éstos externos como pueden ser los cambios de residencia, de país, de etapas profesionales o familiares; como internos, refiriéndome a los estados de tu evolución, nuevas maneras de verte a ti misma y al mundo, descubrimientos que haces dentro de ti, despertares, samadhis, viajes trepidantes tanto a las profundidades como a las cimas, y una eternidad de experiencias que se tienen cuando caminas por la senda del Ser. Sin embargo, desde hace unos meses me siento extraña, con frecuencia observo sensaciones en mi cuerpo relacionadas con emociones densas y con el sentimiento de que algo muy importante está sucediendo. Sé que se trata de la transformación de la vida sobre la Tierra y que todas las mujeres despiertas hemos sido llamadas a apoyar este proceso tan fuerte de transformación alumbrándolo a través de la sabiduría de nuestros propios cuerpos y vidas. Aún con esa certeza, es un proceso mucho más fluido y dulce cuando se tienen las herramientas adecuadas para ello y te hermanas con otras mujeres creando círculos de activación femenina o participando en talleres como Yogini. El curso de yoga para la mujer, en el que desataremos poderes en nosotras mismas que desconocíamos y activaremos la magia de ser canalizadoras de la auténtica feminidad.
Seamos guiadas hacia estados más elevados de Consciencia en los que la alegría, el color y la risa emanen de nosotras con libertad plena.
Namaste